Poema publicado en la revista
Ciudad de noche , Barcelona Mayo 1999
Quitándole la malla, el escudero
dijo al amo: -“Señor, ¡qué gran cipote!
tan excelso y tan fuerte como acero,
famoso es que prodiguen vuestro mote.”
“-Si os agrada, no le pongáis más peros:
no os quedéis ahí como un monigote;
quitaos el jubón, quedaos en cueros,
si no queréis que os dé un buen par de azotes.”
“- No sé si me atreveré: ¿es placentero?”
“- Y tanto que así folla el sacerdote,
la puta, el príncipe y el mundo entero.
Venid bribón: que os voy a dar garrote.
Mi lanza mojaré en vuestro trasero
y ya me contaréis en estrambotes.”
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